El nuevo álbum de Los Mesoneros, titulado «Nuestro Año», está compuesto por 12 canciones que suman 37 minutos y 37 segundos de música. Este trabajo se presenta como un viaje nostálgico que, a mi parecer, experimenta altibajos a lo largo de su duración.
Tras su anterior producción, «Pangea«, había incertidumbre sobre la dirección que tomaría la banda con su próximo LP. Sin embargo, «Nuestro Año» emerge como un viaje singular, que si bien no supera a «Pangea» musicalmente, se posiciona muy cerca en términos de calidad y emoción.
La pista que da nombre al álbum abre el LP en colaboración con Caloncho, un compositor mexicano cuya influencia se percibe en el fresco matiz de sintetizadores que acompaña los sonidos característicos de Los Mesoneros. Esta canción ofrece un inicio romántico y tranquilo al álbum.
«Dos«, la segunda pista, es un rompeolas con un aire ochentero. Las referencias a «Pangea» en la letra crean una conexión directa con el disco anterior, y la influencia de Luis Jiménez es palpable, especialmente a mitad de canción. Este tema brilla por su pureza pop.
«¿Qué hora es allá?» es una oda a las relaciones a distancia, con una letra triste pero una composición musical que inspira esperanza, haciendo que quienes han vivido situaciones similares se sientan identificados.
«Cumpleaños» destaca por ser musicalmente la más atractiva para mí, con una voz desgarrada de Luis Jiménez que transmite dolor pero de manera divertida y sentimental, provocando que el oyente quiera bailar casi instantáneamente.
En contraste, «El puesto es mío» me parece la más débil del álbum, con una letra que resulta repetitiva y poco atractiva, aunque se rescata por un solo de guitarra destacado.
«No terminamos de terminar» mezcla despecho y alegría, con una contribución de Big Soto que introduce elementos de hip hop al estilo pop rock de Los Mesoneros. La canción es notable por su coro pegajoso y un puente magnífico, ideal para corear en conciertos.
«Su lado de la cama«, por su parte, no me transmite grandes emociones a pesar de seguir la fórmula de la banda, y «Más tuyo que mío» sorprende con su batería ochentera y un estribillo contagioso que destaca en el álbum.
«Ingenuo» pasa desapercibida, sin la marca distintiva de Los Mesoneros que brillan en otras pistas, mientras que «Tu canción» es posiblemente la más triste del disco, emotiva de principio a fin.
«Despídete Bien» tiene un aire ochentero y es ideal para el cierre de conciertos por su energía bailable y coros fáciles de seguir. Finalmente, «Diciembre» es la pista menos pop y más personal del álbum, ofreciendo un cierre nostálgico y emotivo.
En conclusión, «Nuestro Año» de Los Mesoneros es un álbum que, si bien es sentimental y no tan visceral como «Pangea», demuestra que la banda sigue siendo capaz de crear música resonante y significativa. Esta es la valoración que ofrecemos en Paltoque.
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